Asociación Moradas nace en 2011, fruto de muchos debates en la Facultad de Educación de la UCM. La principal conclusión de estos debates fue que el sistema de atención y protección a las personas en exclusión social no está sirviendo. Y no está sirviendo porque las dificultades y obstáculos para las personas que están en exclusión social se multiplican cuando intentan salir de esta situación. Porque la espiral de la exclusión social cada vez se hace más profunda, sin que parezca que haya recuperación posible. 

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Moradas en una entidad feminista desde su base, consideramos que el feminismo es la herramienta que va a cambiar el mundo, un feminismo transversal, en el que tengan cabida todas las mujeres. Todo lo que hacemos, lo hacemos desde la sororidad, el "yo sí te creo, hermana" y el "no estás sola". Es decir, para cada una de nosotras el feminismo es una manera de enfrentar la vida, no sólo desde Moradas, sino desde nuestro día a día.

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En esta inquietud de cambiar el sistema de atención y protección a las personas en exclusión social a través de la teoría feminista, consideramos que las más desprotegidas entre lxs desprotegidxs son las mujeres en exclusión social severa, es decir, las mujeres sin hogar. El sinhogarismo es la forma de exclusión social más cruel y severa de nuestras sociedades occidentales. Es duro para todas las personas que lo sufren, mujeres y hombres. Sumada a la situación de sinhogarismo, las mujeres también sufren la opresión patriarcal, como cualquier mujer. No en vano, la principal causa de sinhogarismo femenino es la violencia machista ejercida hacia ellas o hacia sus hijxs. Si rascamos un poco más, y desde la experiencia de acompañamiento de mujeres que atesora Moradas, podemos decir, sin temor a equivocarnos, que la mayoría de las mujeres en situación de sin hogar han vivido o viven situaciones de violencia machista ejercida por parte de su pareja o expareja. Además de otras violencias machistas, claro.

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Desde Moradas no creemos en el voluntariado, ni en la intervención social. Todas las que estamos en Moradas ponemos nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestra acción en la lucha contra la exclusión social femenina. Así, en Moradas no hay voluntarias, sino militarias (híbrido entre voluntariado y militancia). Es decir, consideramos muy importante la acción acompañada de la reivindicación política, sin la cual no tendría sentido la lucha que nos ocupa. 

Por otro lado, en Moradas no creemos en la intervención social. Eso implicaría que las "profesionales" estarían por encima de las mujeres en situaciones de exclusión, y, como ya hemos dicho, todas las mujeres sufrimos opresiones patriarcales, cada una en su ámbito. Creemos en el acompañamiento horizontal entre las mujeres, en la sororidad. 

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Os invitamos a conocernos un poco mejor a través de los vídeos que a continuación colgamos, y a seguirnos en redes: ahí estamos muy activas: 

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